

Economia
Para una familia de clase media compuesta por cuatro integrantes, el costo de vida asciende a 100 jades mensuales, Un funcionario de bajo rango, dotado de la preciada habilidad de leer y escribir, puede aspirar a un salario promedio de 150 jades, lo que le permite cubrir sus necesidades básicas y, con un poco de frugalidad, incluso ahorrar.
Los guardianes del orden, encargados de velar por la seguridad pública, reciben una remuneración acorde a su jerarquía. Los guardias de bajo rango, aquellos que patrullan las calles y mantienen el orden en los barrios más humildes, perciben un salario promedio de 120 jades. A medida que ascienden en la escala de mando, los jefes de escuadrón (200 jades), sargentos (250 jades), comandantes de área (400 jades) y capitanes (500 jades) ven incrementadas sus ganancias, permitiéndoles disfrutar de un estilo de vida más holgado.
En la cúspide de la escala salarial se encuentran los ministros, quienes, con su vasta experiencia y sabiduría, asesoran al emperador en asuntos de Estado. Su servicio es recompensado con un salario mensual de 4500 jades, una cifra que los coloca entre la élite de la sociedad. Las consortes del emperador, por su parte, reciben un estipendio de 2000 jades mensuales, suficiente para mantener una vida de lujos y comodidades.
La familia imperial, símbolo de la autoridad y el poder, goza de privilegios económicos sin parangón. Cada miembro recibe una asignación mensual de 5000 jades, y para celebrar la llegada del nuevo año, se les otorga una bonificación extraordinaria de 20 000 jades a cada uno, beneficio del cual gozan incluso los bebes.
Para el ciudadano promedio, una comida frugal en un puesto callejero puede costar alrededor de 1 jade, mientras que aquellos que buscan una experiencia culinaria más refinada pueden desembolsar hasta 4 jades en un restaurante de calidad media. Para los paladares más exigentes, las cenas en los exclusivos restaurantes imperiales pueden llegar a costar hasta 20 jades, un precio exorbitante que solo la élite puede permitirse.
El descanso después de un largo día de trabajo tiene un costo variable. Una noche en una posada de mediana calidad, que incluye cena y desayuno, asciende a 5 jades. Sin embargo, para aquellos que buscan un mayor confort y exclusividad, las opciones se multiplican, con precios que pueden alcanzar incluso los 50 Jades la noche.
Los caballos, símbolo de estatus y poder, también tienen un precio considerable. Un corcel de pura sangre, con su imponente porte y elegante galope, puede llegar a costar entre 150 y 200 jades, una suma que solo los más adinerados pueden pagar.
El sueño de poseer una vivienda propia es un anhelo compartido por muchos. En la capital imperial, donde el espacio es un bien preciado, los precios de las casas varían considerablemente. Una modesta vivienda de tres habitaciones, cocina, comedor y jardín puede costar hasta 2000 jades, mientras que las mansiones más opulentas, con sus lujosos jardines y extravagantes decoraciones, pueden alcanzar precios exorbitantes que superan los 50 000 jades.
En el ámbito fiscal, el imperio no impone un impuesto al valor agregado, una medida que busca estimular el comercio y la actividad económica. Sin embargo, los comerciantes deben contribuir al sostenimiento del Estado mediante el pago de tarifas que oscilan entre el 5% y el 10% de sus ganancias brutas dependiendo del volumen de sus transacciones. La adquisición de inmuebles también implica un recargo del 5% a favor de la corona, un gravamen que busca financiar las obras públicas y el mantenimiento del aparato estatal.
El jade, símbolo de riqueza y prosperidad, es la moneda de curso legal en el imperio. Emitido exclusivamente por el Gran Banco Imperial, cada billete está patentado con un material único que emite un brillo peculiar al exponerse a la luz del sol.
El Gran Banco es gestionado por la corona y respalda el valor de la moneda, el cual está dividido en oro, plata, jade y la propia tierra del imperio
Los ciudadanos pueden guardar su dinero en el Gran Banco sin costo alguno por apertura de cuenta. El banco también ofrece préstamos y financiamientos para el emprendimiento de negocios o la adquisición de tierras (el banco posee alrededor del 60% de las fincas en todo el imperio).
Los billetes de jade en curso legal son de denominaciones de 1, 2, 4, 5, 10 y, para grandes transacciones de 100.